Nagua, Rep. Dom.
Como desgarradora podría calificarse la sensación de impotencia que ocurre cuando la gravedad de un ser querido necesita con urgencia el servicio de una ambulancia y ésta no aparece; por eso valoramos en su justa dimensión los esfuerzos que están haciendo los miembros de la Unidad de Rescate Filial Nagua, para reparar el motor de su ambulancia que hace bastante tiempo que está dañado.
En ese sentido hemos colaborado económicamente para contribuir a la compra de un motor para dicha ambulancia y de esa manera solucionar definitivamente esa problemática y que el pueblo pueda usarla cuando lo amerite el caso.
Solicitamos a que cualquier ciudadano que desee colaborar con esta causa, acercarse a la Unidad de Rescate-Nagua, en la calle Altagracia.
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